Entrevista a Salva Gómez Cuenca, director de producción.
Director de Producción
Salva Gómez Cuenca es de los que ha ido creciendo dentro del panorama del cine español, de los que pasa de cargos pequeños a grandes y de momentos gloriosos a bajones para, finalmente, establecerse en el cargo y la compañía que llevaba años deseando. El símil del botones que pasa a director de hotel.
Ha trabajado junto a José Luis Garci en múltiples filmaciones. Incluso dirigió un corto basado en un relato escrito por su maestro. Y, de entre la extensísima relación de artistas con los que ha compartido momentos de rodaje, voy a destacar solo a unos pocos porque su histórico es inacabable (de suma y sigue) y continúa creciendo. Aquí van las pinceladas: Fernando Fernán Gómez, Kris Kristofferson, Maribel Verdú, Amparo Larrañaga, Elsa Pataky, Paula Echevarría, Rafael Alonso, Cayetana Guillén Cuervo, Lydia Bosch, Kim Cattrall, Ángela Molina, Carmen Maura, Agustín González, José Luís López Vazquez, Willie Nelson, Ricardo Darín, Penélope Cruz, Emilio Estévez, Anna Galiena, Alfredo Landa, Joe Mantegna, Danny Aiello, Vincent Pérez, Franco Nero, Jonathan Banks,…
Comenzó su aprendizaje a los 16 años como meritorio de cámara. Nada menos que en Los santos inocentes y de la mano de su padre, Salvador Gómez Calle (un gran reconocido ayudante de cámara, con más de 220 películas en su haber). Tras este rodaje, le entró el gusanillo y padre e hijo llegaron a un acuerdo: si seguía estudiando, le llevaría a tantos rodajes como pudiera. Y así fue. Durante diez años estuvo trabajando y aprendiendo como auxiliar de cámara en películas como La estanquera de Vallecas (de Eloy de la Iglesia), SLUGS (de Juan Piquer) o Espérame en el cielo (de Antonio Mercero). Fue progresando en el departamento de cámara haciendo las veces de ayudante de cámara para, más tarde, pasar a ser operador de cámara, teniendo la suerte de trabajar en grandes producciones españolas e internacionales. Hasta que José Luís Garci, con el que había trabajado anteriormente y al que conocía desde pequeño con mil y una “charla” de cine de entre medias, le ofreció ser su primer ayudante de dirección en la película El abuelo. Desde el primer minuto creyó que este proyecto podría ser una oportunidad excelente para entrar en el mundo de la dirección (lo que siempre fue su sueño) y, aunque finalmente no lo consiguió (le hubiera encantado ser director) si que le sirvió para cambiar de rumbo y dedicarse por completo a la ayudantía de dirección y a la dirección de producción.
Tuvo la fortuna de trabajar con directores de la talla de Juan José Campanella en Vientos de Agua, con Sergio Renán en La soledad era esto así como en varias películas con José Luís Garci como Historia de un beso, Ninette o Luz de Domingo. Éstos y otros grandes directores y proyectos le asentaron definitivamente en la Ayudantía de dirección y en la Dirección de producción. Tanto fue así que se atrevió a dirigir su primer cortometraje A ciegas… con el que consiguió un Goya, entre otros muchos galardones.
Pero, como indicaba inicialmente, pasó por varios baches. Realizó, como Productor Ejecutivo, Sangre de mayo, película que no cumplió las expectativas de publico que se esperaban y que desencadenó en varios desacuerdos con José Luis Garci y su posterior salida de la productora Nickel Odeon Dos. Con ello se consumó la separación del que había sido su mayor valedor en la industria, D. JL Garci. Después de doce años de estrecha colaboración salía de la productora a finales del año 2008, justo cuando entrábamos en la anterior crisis financiera. Esto provocó un año de sequía del que sacó grandes conclusiones que le servirían a lo largo del tiempo.
Tras esta crisis, comenzó una gran remontada, primero impartiendo clases de producción en el Instituto del Cine de Madrid (NIC) y posteriormente con rodajes como Pasaje de Vida, Kóblic o su primera película como director en la fallida comedia titulada Aparatos. Se repuso de ello y se puso al mando de la dirección de producción en la complicada serie Queens (Reinas), la cual fue producida y dirigida por un personaje muy de moda en estos momentos: José Luís Moreno (del que prefiere no hablar).
Actualmente, y desde hace varios años, se dedica en pleno a la dirección de producción, habiendo ejercido como tal en varias productoras. Concretamente, desde hace unos cuatro años desempeña ese cargo en GOOD MOOD PRODUCTIONS SL, productora que ha llevado a cabo alguna de las producciones más exitosas de estos últimos años como El accidente (Telecinco), Estoy vivo (TVE), La valla (Antena 3) o Deudas (Antena 3), todas de la mano de Daniel Écija, uno de los mejores showrunner de este país.
Entrevista a Salva Gómez Cuenca
¿Qué te gustaría responder que nunca te han preguntado?
Me lo estas complicando… y acabamos de empezar la entrevista. Jamás se me habría ocurrido pensar que me podrían hacer esta pregunta. Pero, allá voy…
Me hubiera gustado que me preguntases que tal me fue en las Maldivas con Julia Roberts, pero como eso no ha pasado y me temo que no va a pasar (no me deja Virginia ¡jajajajaja!) pues me hubiera gustado que me hubieran preguntado sobre cuál es mi opinión sobre la incidencia, cada vez más creciente, de la mujer en el mundo audiovisual, por ejemplo.
Me imagino que ahora querrás saber cuál es, ¿no?
Sí, claro…
Pues creo que la identificación de la mujer con el medio va cada vez a más y es para celebrarlo porque el cerebro, disciplina, sabiduría de una mujer no es comparable con nada. Se dice que tienen un sexto sentido y qué mejor lugar para potenciarlo que dedicándose a esta industria en la que casi nunca se sabe cuándo se viene y cuándo se va. Creo que la aportación de las mujeres, bien sea como directivas o en la producción, dirección, arte, vfx (o cualquier otro departamento de nuestro oficio) sólo nos puede hacer crecer y ser más grandes, tanto a ellas como, por supuesto, a nosotros.
¿Se puede desarrollar una vida personal ajena al mundo de los sets? ¿Te ha resultado difícil?
Por supuesto que se puede. Yo intento evadirme lo más que puedo cuando no trabajo y me dedico a mi familia y amigos pero, lógicamente, siempre pensando en que pasará en la próxima citación de rodaje.
¿Con qué te quedas de cada director de los que más te han influido?
Quedarme me quedo con muchísimas cosas, detalles, momentos, formas…
El Director es la persona más importante e influyente en un rodaje y sinceramente, creo que de todos se aprende porque cada uno es un mundo, con una personalidad diferente, con una forma distinta de contar las historias…
El Director es la persona más importante e influyente en un rodaje y sinceramente, creo que de todos se aprende porque cada uno es un mundo, con una personalidad diferente, con una forma distinta de contar las historias…
Salva Gómez
Por citar a dos, dentro de lo injusto que es hablar sólo de dos, te comentaría de José Luís Garci por los años que he pasado con él y por la cantidad de momentos vividos; y con Juan José Campanella porque trabajar con él fue un sueño hecho realidad.
De José Luís Garci me quedo con su sabiduría cinematográfica, su pausa en los momentos más delicados, su buen hacer en la dirección de actores, su planificación, su personalidad para remar a contra corriente y con su inteligencia. Es un auténtico estratega, una persona muy sabia en cine, teatro, pintura, música con una pasión tremenda por lo que le gusta, sobre todo el boxeo.
De Juan José Campanella podría destacar todo: es un fenómeno, un autentico crack, un genio, un trabajador incansable, con un talento fuera de lo normal, maravilloso director de actores, conoce a la perfección el funcionamiento de todos los departamentos que componen un rodaje. Soy un fan de Campanella y de sus historias. Es un creador increíble.
Me gustaría poder hablar de otros muchos con los que tuve la suerte de trabajar y de los que guardo un enorme recuerdo, pero me llevaría tres días enteros hacerlo. Si me permites, voy a poner un nombre en representación de todos ellos: Antonio Mercero.
Con todo el bagaje que tienes, tendrás muchas anécdotas que contar. ¿Cuáles son las cinco más importantes? Las primeras que te vengan a la mente…
Te voy a contar solo tres:
Haciendo una serie de RTVE, titulada Historias del otro lado, en un capítulo era imprescindible la lluvia, el mal tiempo… Se localizó en Asturias en pleno diciembre. Pues… ¡nos encontramos con 22 grados centígrados y un sol de justicia durante 20 días! Terminaron llamando a los bomberos para que nos acompañaran en todo el rodaje: cada día que pasaba hacía mejor tiempo.
Rodando Brácula, película que produjo y dirigió Álvaro Sáenz de Heredia y que protagonizaba Chiquito de la Calzada, estábamos en el Mar Menor rodando una secuencia en la que un tiburón perseguía a Chiquito. Pues bien, se eligió la zona del Mar Menor porque Chiquito no sabía nadar y de esta forma podría estar más seguro. La escena se repitió 46 veces porque Chiquito se ponía nervioso. En las últimas tomas, el tiburón de FX ya salía sin ojos del agua: se le habían borrado (de tanta agua, ¡jajajajaja!), así que cada vez que salía el tiburón nos partíamos de la risa. Y otra vez a repetir bajo el estupor del pobre Chiquito…. ¡Qué risa por favor! ¡Jamás podré olvidar ese momento! Es más: a día de hoy, cuando nos vemos algunos de los presentes, lo recordamos y nos da un ataque de risa.
Y la última… Rodando el Robobo de la jojoya, con Martes y Trece, decidimos salir una noche con Millán y Anabel Alonso. Era pleno verano y andábamos por el centro de Ibiza- Paseando, nos encontramos sentado en una mesa a Boris Becker (jugador de tenis del momento). A Millán no se le ocurrió otra cosa que saludarle, pero como Boris era un poco mal educado, ni contestó. Tras eso, a Millán solo se le ocurrió sentarse frente a Boris y hacer el ruido del golpeo de una raqueta en la pelota y girar su cabeza de izquierda a derecha y viceversa (juaajuajauajua). ¡Nos queríamos morir! Boris no entendía nada y Millán no paraba de repetir el ruidito y el giro de cabeza (jajaja).
¿Por qué acabas rodando tu delicioso corto A ciegas…? ¿Qué tal fue la experiencia?
Muchas gracias por lo de delicioso.
Es una historia divertida, para empezar yo no creía nada en el formato corto tal y como se desarrollaba en España en esos momentos, pero se nos retrasó el rodaje de la película Luz de Domingo, por temas de financiación, y algo había que hacer… Teníamos a medio equipo contratado, otros apalabrados y otros que no paraban de animarme a que dirigiera un corto. Así que saqué del cajón una historia que había escrito años atrás basada en un relato corto que contó Garci en un programa de radio que dirigía Pumares.
Se lo mostré al actor Enrique Villén porque desde que le vi en una película de Alex de la Iglesia siempre pensé que sería un fantástico Martín (nombre del personaje protagonista). Enrique lo vio y esa misma tarde me llamó y me dijo «Salva voy a hacer este personaje y además te lo voy a producir». Y así fue. Nos juntamos esa misma tarde y lo pusimos en marcha con unos ahorros de Enrique y con su productora Bisojo, además de con una ayuda/premio que había conseguido yo por ese guion en la Comunidad de Madrid. Después Garci nos ofreció su productora y fueron llegando uno a uno los demás: Gil Parrondo (director de arte), Julián Mateos (ambientador), Ricardo Navarrete (cámara), Julio García (cinegrúa), Miguel Rejas (sonido), etc. mostrándome su interés por formar parte del equipo del corto.
Imagínate mi cara, no daba crédito. Recuerdo la lectura de guion como si fuera ayer. Todos querían ofrecerme cosas maravillosas y totalmente fuera de mi alcance e incluso de lo que yo creía necesario para la realización del corto. ¡Sólo con tenerlos a ellos y los demás miembros del equipo allí, conmigo, ya era el tío más feliz del mundo! No necesitaba nada más, sólo teníamos que contar la historia y, a ser posible, de la forma más sencilla. Finalmente, así se hizo y nos salió muy bien ya que A ciegas… nos dio muchas alegrías a todos.
¿Qué te acabó frenando frente a la posibilidad de dirigir largometrajes o más cortos?
Bueno, realmente la falta de oportunidades (jajajaja).
Hace unos años creí que lo iba a conseguir, me ofrecieron dirigir una película titulada Aparatos y la verdad es que tenia una pinta extraordinaria. Nos rodeamos de lujo, con un equipo técnico top y con unos actores que no había podido soñar ni en el mejor de mis sueños… Gabino Diego, Gaby Espino, Mariola Fuentes, Jorge Sanz, Ramón Langa, Eduardo Gómez, María Zabay, Manuel Galiana y María Kosty, con la colaboración de Sofía Vergara entre otros, pero al productor (prefiero omitir el nombre) no le salieron bien sus cálculos con sus inversores y se quedó sin dinero en la tercera semana de rodaje, así que tuvimos que suspender el rodaje y, lamentándolo mucho, decir adiós al sueño.
¿Qué te atrapa más de rodar series y qué de rodar largos?
Me atrapa rodar series y me atrapa rodar largos. Realmente, lo que me atrapa es rodar. Salva Gómez Cuenca.
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Cuando un largo es bueno, cuando una película es redonda, el formato es inmejorable. Contar una historia en una hora y media y poderla disfrutar en pantalla grande con el ambiente que transmiten las salas de exhibición en cuanto a sonido y proyección es algo insuperable.
Ahora bien, las series tienen un punto extra. Una serie, si te gusta… te atrapa y quieres más y después más: son como las buenas novias que nunca llega el momento de dejarlas en casa.
Ahora mismo en España se están creando series fantásticas. Hay que aprovechar el momento y sobre todo hay que disfrutarlo.
Por poner una referencia temporal, ayer estuvimos ambos con las esperanzas puestas en la nueva Selección Española de Fútbol, muy joven por cierto. ¿Qué te gusta de rodar con la juventud?
La juventud lo es todo: son las ganas, la emoción, la fuerza… Pero siempre se debe mezclar con la experiencia, con la sabiduría y con la tranquilidad que dan los años de profesión.
La juventud lo es todo: son las ganas, la emoción, la fuerza… Pero siempre se debe mezclar con la experiencia, con la sabiduría y con la tranquilidad que dan los años de profesión.
SALVA GÓMEZ
Utilizando el símil de la selección de fútbol que me propones, te diría que la juventud es ilusionante, desprenden desparpajo, velocidad, ganas… Pero poco o nada se puede hacer si no se combina bien con la sabiduría, la colocación, la tranquilidad y la experiencia. Mira Italia, que, para mí, es la favorita para ganar la Eurocopa 2020: combina a la perfección juventud y experiencia. Estoy seguro que no serían lo mismo sin Chiellini y Bonucci, dos centrales de casi 40 años.
Se ve (en tu FB) que tienes una relación entrañable con muchas de las actrices y actores con los que trabajas. ¿Cómo se relacionan los del departamento de cámaras o de producción con ellos/as para que pueda, literalmente, traspasar la cámara?
Ser actor es lo más difícil de este oficio y, como les digo a todos los/as chicos/as de mi equipo, hay que intentar facilitarles la labor: es importante que tengan que pensar poco o nada una vez que llegan al rodaje y se bajan del coche de producción. Hacerles su estancia en la jornada de rodaje lo más apacible posible es fundamental para que así puedan dar el máximo. Lo demás ya corre de su parte: saberse el texto, colocarse en la luz, dar correctamente las réplicas de texto, transmitir el personaje…
Ser actor es lo más difícil de este oficio y, como les digo a todos los/as chicos/as de mi equipo, hay que intentar facilitarles la labor: es importante que tengan que pensar poco o nada una vez que llegan al rodaje y se bajan del coche de producción.
Salva Gómez Cuenca
Disfruto muchísimo viendo a mis compañeros/as actores y actrices realizando su trabajo. Pasaría más tiempo en el set sólo por verlos interpretar. Confieso que a veces he llorado, otras he reído a carcajadas y otras, muy pocas, incluso me he cabreado (jajajajaja).
Al final, una película o una serie te llega o no te llega a través de esas personas (porque son personas) que se ponen delante de la cámara. Y ya sólo por eso merecen el mayor de mis respetos.
¿Con quién no has trabajado aún que te encantaría hacerlo? Y de los que ya nos han dejado, ¿te hubiese gustado trabajar con alguien?
Me hubiera encantado trabajar con Berlanga. Y me hubiera gustado mucho haber trabajado de Ayudante de Dirección con Almodóvar (me apasiona el cine de Pedro Almodóvar) y con Manuel Gómez Pereira, que para mí es el mejor en el género de comedia. He tenido la suerte de poder trabajar con Manuel en el departamento de cámara, pero me hubiera encantado ser su ayudante de dirección (que conste que se lo he dicho ehhh y Manolo, como es un ser maravilloso, sonríe).
¿Cómo trabaja Good Mood (traducido sería el buen humor o buen estado de ánimo, buen rollo…)? Habéis trabajado para diferentes cadenas televisivas. ¿Qué funciones llevas tú a cabo en la productora?
Good Mood es una productora muy joven en el sector, comandada por Daniel Écija que es uno de los mejores Showrunner de este país.
Para muchos de nosotros es una auténtica referencia. Hemos ido haciéndonos mayores con algunas de sus creaciones como Médico de familia, Periodistas, 7 vidas, Los Serrano, Un paso adelante… Y casi, casi, ancianos (jajajajaja) con El internado, Águila Roja, Aida, etc. Ahora, pasados veintitantos años, ahí continúa, en Good Mood, sorprendiéndonos con series como El Accidente, Estoy vivo o La valla. ¡Y lo que le queda! Hay proyectos fantásticos y muy sorprendentes en marcha de los que, por supuesto, me gustaría seguir formando parte.
Sinceramente creo, que combinación de juventud sobradamente preparada (como es el caso) con algunos toques de veteranía en el oficio es una buena mezcla para elaborar un buen coctel. Por ello, estoy muy feliz de pertenecer a la familia Good Mood y seguir apostando por esa línea de trabajo con mucho good mood.
Para los ajenos, ¿qué diferencias hay entre Director ejecutivo, Director de producción y Showrunner?
Te contesto por el orden establecido.
Showrunner es el autor-productor: es la persona que crea la serie y, normalmente, participa del guion y además produce la serie.
El productor ejecutivo es el siguiente eslabón a continuación del productor/showrunner de una serie o película. Es la persona que supervisa la realización del proyecto. Tiene mando total en plaza, suele influir en cómo contar la historia, hace todas las aportaciones y comentarios del guion que cree precisas tomando las decisiones más importantes del proyecto. El productor ejecutivo esta en sintonía permanente con su director de producción para todo lo relativo a los temas económicos de la serie. Además de estas misiones puede ejecutar otras muchas, siempre dependiendo del país o incluso la productora dónde se lleve a cabo el proyecto.
¡El director de producción es el último mono (jajajajajaja)! Es el encargado de gestionar el dinero destinado al proyecto. Todo comienza con los respectivos desgloses de guion y elaborando un presupuesto basado en un plan de rodaje que debe cotejar y aprobar con anterioridad. Siempre he sido de la opinión de que no es mejor director de producción el que menos gasta, si no el que sabe dónde y en qué gastar el dinero disponible sin que, en ningún momento, se resienta el proyecto que estés llevando a cabo.
Siempre he sido de la opinión de que no es mejor director de producción el que menos gasta, si no el que sabe dónde y en qué gastar el dinero disponible sin que, en ningún momento, se resienta el proyecto que estés llevando a cabo.
Salva Gómez Cuenca
¿Qué es lo que enseñabas en el NIC? ¿Qué tal es la experiencia de la enseñanza? Tú eres un claro ejemplo de quien aprende practicando. ¿Crees que los estudiantes van a estar mancos en esa materia?
Daba clases en la diplomatura de producción, y en algunos momentos, sobre todo a final de curso con el tema de las prácticas finales, impartía alguna clase de ayudantía de dirección, de cara a la organización de los diferentes rodajes de final de curso.
Mi experiencia como docente fue fantástica. Los resultados… no soy quién para juzgarlos, para eso están los directores del instituto, los tutores o alumnos. Pero estoy muy orgulloso de que han trabajado o trabajan conmigo algunos de los que fueron mis alumnos. Son gente fantástica, muy preparada y muy valientes. Soy un ferviente seguidor de ellos: cada vez que me entero de que fulanito o menganito ha empezado un rodaje en una u otra productora me llevo una alegría tremenda.
Los jóvenes están muy preparados y, en su mayoría, son gente estupenda con la que da gusto compartir.
¿Mancos dices? ¡Pero si tienen más oportunidades que nunca! Hay mucho trabajo en la actualidad. Ahora, en las series, los equipos son inmensos. Yo hace 20 años hacía películas con 48 técnicos y sólo había dos o tres lugares dónde formarte. Ahora, en cambio, hay mil escuelas y en muchas de ellas realizan sus practicas. Les imparten clase gente muy valorada en el medio. No hay rodaje que no haya técnicos en prácticas. Están mejor que nunca, y con mil posibilidades.
Lo que ocurre, al igual que les pasa a los actores, es que hay miles…. Y, claro, trabajo para todos es complicado, pero te aseguro que el que la sigue la consigue.
Has trabajado a nivel internacional. ¿Hay diferencias significativas respecto a rodar en España?
Cada vez hay menos. Cuando iba con mi padre como auxiliar de cámara o, más tarde, como ayudante de cámara a ese tipo de producciones sí que veía la diferencia. Los presupuestos eran incomparables con los de aquí y eso se dejaba notar en todo lo relativo a la producción.
Yo me fijaba mucho en la forma de hacer del departamento de producción, pues quizá era dónde más se notaba la diferencia. Muchas veces no era un tema sólo económico sino más bien de trato, de seriedad, de compromiso. Me refiero a que, por ejemplo, antes de salir de Madrid o de España, ya tenías un sobre con toda la información del destino, la información sobre médicos, taxis, restaurantes, lugares de interés, precio del cambio de moneda, zonas peligrosas, museos, lugares de ocio, etc. Esto no era cuestión de pasta, era cuestión de ganas de hacer las cosas bien y así lo he intentado llevar a cabo en todas y cada una de las producciones de las que he formado parte.
Pasados los años me encuentro con técnicos de producción que han trabajado con esas pautas y me lo agradecen enormemente a la vez que me dicen que lo siguen haciendo y ese te aseguro que es el mejor de los premios.
¿Qué han supuesto para ti tu padre y tu madre? Se ve en tus RRSS que, como a tu hermana, les adoras.
Mi padre es Dios. Gracias a él he podido trabajar en este maravilloso oficio. Es un ser entrañable, muy buena persona, un profesional increíble,… que estuvo trabajando hasta los 78 años (y porque mi madre enfermó, sino seguiría pegado a la cámara). En la profesión lo adoran y eso nos hace a todos muy felices. Es un tipo de cine, de cine español. Y lo adoro.
Mi madre ha sido una crack. El pilar de nuestra familia. Mi padre viajaba mucho y ella siempre estaba con nosotros. Yo no recuerdo pasar una noche sin mi madre en casa. Se dedicó en pleno a nosotros. Si mi padre rodaba en Almería, hablaba con el director del colegio y… todos a Almería, Canarias, Marbella…
Fue una época maravillosa que recuerdo perfectamente y de la que no me gustaría olvidarme jamás. Y digo esto porque ella, que pensaba igual que yo, al final se tuvo que olvidar de todo por culpa del maldito Alzheimer.
Mi hermana también es una crack, muy divertida. Discutimos bastante, como todos los hermanos, pero nos queremos mucho y nos respetamos más. Ahora tenemos una misión común compartida con su marido y mi mujer que no es otra que cuidar del abuelo Salva.
Entonces… ¿tenéis algún proyecto en marcha actualmente?
Estamos en proceso de pre-pre-producción del que será nuestro nuevo proyecto en Good Mood. Poco puedo contar pues aún se están escribiendo los guiones. Pero estoy seguro de que no va a dejar indiferente a nadie. El proyecto promete.
Y, a la vez, estamos preparando nuevos presupuestos de futuros proyectos. Esto es un sin parar. ¡Y que no falte!
¿Cómo deseas jubilarte?
¿Te lo digo?
No corras, que aún faltan unos 10 o 12 años… pero lo tengo pensado. Sólo tengo una duda, Málaga o Asturias… Pero me gustaría vivir tranquilo, con mi mujer, rodeado de toda la gente querida, con alguna que otra visita de Álvaro (mi hijo) y recordando con mucho amor a los que seguramente ya no estarán con nosotros. Viviré el final de mis días tremendamente agradecido por todo lo que me ha tocado vivir. Sin duda alguna, ha sido una vida maravillosa, te lo aseguro.
En esta profesión se disfruta mucho, pero se descansa poco, es todo muy intenso, lo malo y lo bueno, por lo que una casita cerca del mar, tomando una sidra y unas andaricas (nécoras), si finalmente es en Asturias, o un finito y unos boquerones, si es en Málaga, no me parece mal plan.
¿No te parece? Si se cumple, prometo que estás invitada.
Estaré encantada de ir y… ¡te tomo la palabra, Salva!
Entrevistas y artículos realizados por Carmen Nikol.
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